UN MUNDO AZUL nació de una búsqueda personal, después de varios años en la Arquitectura. Fue un camino sinuoso el que me trajo hasta la orfebrería (pasando por la escritura, el reciclaje de muebles, la decoración… en fin, siempre haciendo algo con mis manos) camino que, en muchos puntos y siempre de manera diferente, me ha vuelto a acercar al origen. Para mí está todo relacionado: la formación, los viajes, las formas y las palabras. El amor por la Naturaleza y las culturas primitivas, la curiosidad por aprender cosas nuevas y la admiración que siento por el diseño. En 2013 llegué a Granada y tuve la oportunidad de aprender el oficio. Desde entonces no he parado de evolucionar, y espero seguir haciéndolo ¡hay tanto que me queda por aprender! Agradezco infinitamente a todos quienes me apoyaron, y sobre todo a los que compraron mis primeras joyas. Eso fue una gran ayuda para que continuara mi camino.